domingo, 2 de abril de 2017

¿Y si hubiese sido el último día de mi vida?



Y si…?

Y si ayer todo hubiera terminado? Y si hubiese sido el último día de mi vida? Y si inesperadamente las cosas dieran un vuelco y no pudiera hacer lo que más me gusta hacer en la vida nunca más?


Estas son algunas de las preguntas que me rondaban por la cabeza ayer por la noche. Reviví algo que me pasó hace años y mi cabeza se puso a funcionar como ya lo hizo entonces… Por estas fechas hace unos 6 años tuve un TEP (un tromboembolismopulmonar): un trombo en una vena del brazo que se me fue al pulmón. Estuve meses recuperándome, no podía viajar en avión, a penas podía respirar porque me daban pinchazos, y, por lo tanto, no podía cantar ni sabía si volvería hacerlo.


Ayer, cuando se me hinchó un poco el brazo y se oscureció pensé que iba a pasar por lo mismo. No quería ir a urgencias porque sabía que si me detectaban el trombo no saldría de allí, me ingresarían directamente y, probablemente, estaría allí unos días, puede que incluso unas semanas (cuando os pase algo así, no hagáis como yo, id directamente a urgencias, los riesgos son muy grandes, y más vale ponerle remedio cuanto antes). Me encanta hacer cosas, no soporto estar parado, tengo un sentido de la responsabilidad muy desarrollado y no soy bueno faltando a mis compromisos por lo que, como podéis imaginar, todo en lo que podía pensar era en: TENEMOS UN CONCIERTO EL 8 DE ABRIL!!! ESTO NO PUEDE ESTAR PASANDO!!! Mucha gente que ya tienes sus entradas, gente que viene de fuera y ya tiene sus billetes, gente que ha organizado su vida para venir, gente que viene por primera vez a vernos, gente de la de siempre… Y ha estado a punto de esfumarse todo!




Me alegra decir que al final todo fue un susto, y estoy absolutamente sano. Pero cierto es que estas cosas siempre me llevan a pensar en que hay que aprovechar el tiempo, hay que vivir la vida con intensidad, haciendo las cosas que nos gusta hacer, sin posponer eternamente esos planes que estamos deseando hacer y, sobretodo, compartir los momentos con toda esa gente que nos rodea y que está deseando darnos cariño. Por eso, si ya estaba emocionado con subirme al escenario el próximo sábado 8 de abril para compartir con todas las personas que vengáis todo lo que tenemos dentro, ahora aún más, con más razón, más ilusión, más ganas, más fuerza y más magia que nunca.






Así que NO OS PODÉIS PERDER ESTE CONCIERTO, porque puede que para el próximo esté muerto! Jaja! Perdonadme… es mi humor!






Deseando veros Pasajer@s!

Alejandro Ramos
VAGÓN PI

Entradas a la venta AQUI